Durante la madrugada de este lunes, Carabineros realizó un operativo policial en el que cual se detuvo a tres sujetos que estarían vinculados al triple homicidio de Carabineros el pasado 27 de abril en la comuna de Cañete, Región del Bío Bío, donde falleció Sergio Arévalo (34), Misael Vidal (30) y Carlos Cisterna (43).

Según el Ministerio Público, las detenciones se llevaron a cabo mediante operativos simultáneos en el sector de Antiquina de Cañete y en la comuna de Huechuraba, Región Metropolitana.

«Estas acciones responden a órdenes judiciales solicitadas por la Fiscalía en el marco de la investigación liderada por el fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido», precisó el Ministerio Público.

Según información de La Tercera, los detenidos son comuneros mapuches que serían integrantes de los grupos Weichán Auka Mapu (WAM) y Resistencia Mapuche Lavkenche (RML). Específicamente, se trata de los hermanos Jefferson y Felipe Antihuen Santi, y de Nicolás Rivas Paillao.

El fiscal Garrido detalló que hasta el momento se ha reunido “una cantidad de antecedentes suficientes que nos permiten formular imputaciones en contra de las personas detenidas”, por lo que se espera que los reclusos pasen a control de detención y posterior formalización durante la jornada de hoy. 

Desde fiscalía precisaron que los operativos fueron “limpios”, aunque destacaron que uno de los sujetos que mantenía orden de detención huyó, por lo que se mantiene en calidad de prófugo. Específicamente, se trata de Tomás Antihuen Santi, hermano de dos de los detenidos. Según los antecedentes del caso, Tomás Antihuen habría estado en el momento de los hechos, pues los carabineros se dirigían a su domicilio a realizarle un control de medidas cautelares, ya que estaba cumpliendo arresto domiciliario por una causa por porte de armas e infracción a la Ley de Drogas.

En esta línea, el Presidente Gabriel Boric, valoró el avance de la investigación: “El día que sucedió este vil asesinato, sin importar diferencias políticas, nos comprometimos a que todos los poderes del Estado, la fiscalía, las policías, el gobierno, el Congreso, íbamos a estar todos en la misma línea de perseguir y atrapar a los culpables”. 

Y luego agregó que “ahora, por cierto, le toca su rol a la justicia, que es un poder independiente, ellos tendrán que tomar las definiciones que correspondan, pero acá lo que puedo asegurarles es que se ha hecho un trabajo serio, responsable y que, como hemos dicho en otros casos, en Chile no hay impunidad”.