Durante esta tarde, se estrelló un avión brasileño con 57 pasajeros abordo junto a tres tripulantes en la ciudad de Vinhedo, São Paulo. Según reportes, no hay sobrevivientes del siniestro.
El avión venía del estado de Paraná, al sur de país y se dirigía hacía la ciudad de São Paulo. Autoridades informaron que en tierra, tras la caída, solo resulto dañada una vivienda y que no hubieron heridos.
Voepass, la aerolínea a cargo de este vuelo, es la más longeva de Brasil con 29 años de antiguedad. El fabricante del avión (ATR 72-500) declaró que está «plenamente comprometido» en dar todo su apoyo a la investigación para así esclarecer las causas del accidente.
Este se trataría del accidente más letal desde 2007, cuando, tras la explosión de un avión, fallecieron 199 personas.
Mientras daba un discurso, el presidente de Brasil, Lula da Silva, lo interrumpió para hacer un minuto de silencio en honor a los fallecidos. «Me gustaría que todos se pusieran de pie para que podamos guardar un minuto silencio porque acaba de estrellarse un avión», expresó Da Silva.