Mujica, a sus 89 años, había anunciado públicamente durante el 29 de abril que sufre de cáncer de esófago. A pesar de reportar una buena evolución en la reciente entrevista de The New York Times, y tras concluir su radioterapia contra el cáncer, el exmandatario estuvo nuevamente en el hospital la semana pasada.
De acuerdo a la esposa de Mujica, Lucía Topolansky, durante el día viernes 23 de agosto, el expresidente fue sometido a un chequeo general en el que le hicieron una endoscopía. Si bien se había retirado a su hogar con suero, volvió a ser internado tras no poder inyectarlo, puesto que sufre vasculitis.
Producto de su ausencia en el Día del Comité el Domingo 25 de agosto -celebración por parte de la militancia del Frente Amplio (coalición de izquierda de Uruguay)- se desató la alarma pública. En respuesta, la médica personal del exmandatario, Raquel Pannone, señaló que Mujica se le está dificultando la recuperación por no superar algunos síntomas, contrario a su enfermedad de base.
En adición, Lucía Topolansky apuntó a que el problema de la mejoría del aparato digestivo es la sensibilidad superior de las paredes internas, lo cual lo retrae de comer.