Sin imputados a 5 años del hallazgo de personas calcinadas en Renca

Por: Interferencia
Dos días después del estallido social en Chile, el hallazgo de cinco cuerpos calcinados y uno de ellos con impacto de bala en la empresa textil Kayser en Renca aún no tiene imputados.

El 20 de octubre de 2019, a dos días de iniciado el estallido social en Chile, se hallaron cinco cuerpos calcinados producto de un incendio en la fábrica textil Kayser, ubicada en Renca, provocado por personas aún no identificadas. Los cuerpos corresponden a Manuel Muga (59), Yoshua Osorio (17), Andrés Ponce (38), Julián Pérez (51) y Luis Antonio Salas (47).

Luego del siniestro, el sábado 26 de octubre de 2019, comenzó a circular en redes sociales un video en donde un carabinero se encontraba en el segundo piso de la fábrica, mismo lugar donde ocurrieron los hechos, y donde encuentra en pocos minutos los cuerpos aún humeantes. Según investigaciones forenses que accedieron al material grabado, los cuerpos no se encontraban en una posición natural producto de muerte por incendio.

Luis Renaval, médico forense quien tuvo acceso al video, comentó al respecto en entrevista con Interferencia: “Yo diría que encontrar numerosos cuerpos en posición atípica ya plantea una duda. Lo habitual es que uno encuentre la posición típica del boxeador, con extremidades flexionadas producto de la carbonización. Aquí ocurre a la inversa, o sea, no estamos observando cadáveres que presentan la postura habitual. A eso, obviamente, hay que buscarle una explicación. Porque si uno lo trata con ligereza y dice bueno, pueden quedar en cualquier posición, uno tiene que explicar igual por qué entonces no están en la posición típica».

Otro de los antecedentes del caso es que, a pesar que la causa de muerte anunciada por el Ministerio Público fue producto de la acción del fuego y la inhalación de monóxido de carbono, la autopsia de Luis Salas indicó haber recibido un impacto de bala en su pie entre 8 y 12 horas antes de su muerte. Además el Servicio Médico Legal (SML) aseguró luego de un peritaje posterior a la autopsia que su cuerpo presentaba fracturas desconocidas ocurridas cercanas a su muerte y sin relación al incendio, según investigó Interferencia. También se constató que el cuerpo de Yoshua Osorio presentó tres orificios en el tórax y un hematoma en su cabeza, pero que la autopsia realizada por el SML no indagó sus causas.

Investigaciones del caso

En enero de 2020, el Equipo Chileno de Antropología Forense y Derechos Humanos (ECHAF) elaboró un metaperitaje analítico del caso, el cual se presentó a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte. El informe, arrojó la probabilidad de lesiones previas y durante la muerte de las víctimas, el cual pone en cuestión la supuestas circunstancias en que se produjeron los hechos.

Debido a esto, se constataron una serie de irregularidades respecto a las investigaciones y protocolos realizados por el Servicio Médico Legal en cuanto a las autopsias.

Sumado a esto, una comisión investigadora en el Congreso el 2023, concluyó de manera unánime que existieron falencias en la investigación por parte del SML y el Ministerio Público. El informe se aprobó en noviembre del año pasado por la Cámara Baja con 85 votos a favor y ninguno en contra.

Después de cinco años del siniestro, sigue abierta la causa en Fiscalía a la espera de formalización, la cual aún no da con imputados.