El Partido Liberal ha ganado las elecciones legislativas con un 43,7% de los votos, mientras que el Partido Conservador sacó 41,3% de los sufragios. Aún así, no han podido sacar la mayoría absoluta de los escaños parlamentarios, por lo que tendrán que buscar apoyo para sacar adelante iniciativas legislativas.

“Ya superamos el shock de la traición estadounidense, pero nunca debemos olvidar las lecciones”, señaló Carney, que se mostró optimista a la idea de liderar este diálogo entre “dos naciones soberanas”, con el fin de llevar a cabo una nueva relación en ámbitos económicos y de seguridad.

El economista también señaló que gobernará “con todos los partidos y todos los territorios y la sociedad civil”, anteponiéndose así a la difícil situación de gobernar en minoría y también mostrando un mensaje que tiene la misión de reforzar la unidad nacional.

Ante el rechazo a las políticas de Justin Trudeau, debido a que una parte de la población reclama que han provocado un mayor costo de la vida y una ola de inmigración, Mark tendrá que dar respuesta a ese descontento.

Por su parte, la oposición reconoció el triunfo de los liberales y llamó a la oposición a sacar cuentas sobre el próximo Gobierno canadiense.