En medio de los ataques y la violación a la integridad territorial siria por parte de Israel tras la caída de al-Assad, el secretatio general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, denunció este miércoles que “continúan los ataques aéreos israelíes. Son violaciones de la soberanía y la integridad territorial de Siria” y fue enfático en señalar que estos “deben cesar”.
La caída del régimen de Bashar al-Assad a principios de diciembre por el grupo yihadista Hayat Tahrir al-Sham generó un vacío de poder en Siria que está siendo aprovechado por países vecinos -como Israel y Turquía- y por los grupos armados que operan en distintas regiones de Siria -como Hayat Tahrir al-Sham o los grupos kurdos-. En este marco, Israel ha llevado más de 400 ataques aéreos sobre distintos puntos del país de oriente próximo y también inició una incursión militar sobre la región de los Altos del Golán que puso al ejército hebreo a solo 20 kilómetros de Damasco.
Guterres denunció desde Nueva York la continuidad de estos ataques y los calificó de “violaciones de la soberanía y la integridad territorial de Siria”. Además, se refirió a los ataques al norte de Siria, en donde diversos grupos como Daésh (Estado Islámico), los kurdos o incluso las fuerzas turcas están combatiendo entre sí, situación que señaló como una “amenaza importante”.
Tanto Turquía e Israel, ambos vecinos de Siria, tienen importantes ambiciones el país de medio oriente. Por su lado, Turquía, que apoya a HTS y tiene conflictos con los kurdos, inició también ataques aéreos y está planeando una incursión militar sobre el norte de Siria. Esto último ha elevado al máximo las tensiones entre Tel Aviv y Ankara, puesto que, según reveló el medio estadounidense The New York Sun, el Mossad (servicio de inteligencia israelí) le advirtió al MIT (servicio de inteligencia turco) que un ataque sobre los kurdos significaría cruzar “la última línea roja”.
Pese a esto, milicias como el Ejército Nacional Sirio, apoyado por Ankara, lleva semanas en combates contra los kurdos los cuales luchan en las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyadas por Estados Unidos. Estas últimas se sumaron a los llamados de la ONU de generar un espacio de diálogo y una transición pacífica en Siria, aunque denunciaron a las milicias pro-turcas y a la propia Turquía por ataques sobre Manbij, Qaraqoz y Tishrin. Por esto, han indicado que “no dudaremos a la hora de defender a nuestro pueblo y nuestros territorios ante cualquier agresión o ataque”.