Este jueves 5 de diciembre, el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS) informó la captura de la ciudad de Hama en el marco de una rápida y sorpresiva ofensiva en el noroeste del Siria.

Hama se suma a Alepo como la segunda ciudad capturada por el grupo islamista. Además, desde el grupo señalaron que su siguiente objetivo es Homs, que se encuentra a 140km de Damasco, capital de Siria.

El miércoles 27 de noviembre, el grupo islamista apoyado por Turquía, HTS, inició en el norte de Siria una sorpresiva ofensiva que terminó con la estabilidad en el país de oriente medio, ya que desde hace cuatro años no sucedían incursiones militares de esta envergadura y, de facto, el país había sido dividido por los diversos actores de la guerra civil siria.

Tras dos días de iniciada la ofensiva de HTS, cayó la ciudad de Alepo, sin mayor resistencia y con una apresurada retirada de los oficiales del Ejército Árabe Sirio y de sus colegas rusos.

El Ejército Árabe Sirio, del Presidente de Siria, Bashar al-Assad, es aliado de Rusia y de Irán, países que han sido claves durante la Guerra Civil Siria para mantener a Assad en el poder.

La rápida caída de Alepo generó que los kurdos, aliados de Estados Unidos y enemigos de Turquía, rechazaran la ofensiva y declararan comunicaciones con el Ejército Árabe Sirio para “enfrentar de manera conjunta a los yihadistas y a los falsos rebeldes financiados por Turquía”. Los kurdos, mediante el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) y las Unidades de Protección Popular (YPG), dirigen las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) que controlan el territorio de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria.

Pese a esta alianza estratégica, Hayat Tahrir al-Sham capturó durante la jornada del 5 de diciembre la ciudad de Hama, controlada por el Ejército Árabe Sirio, tras intensos y violentos combates desde el 27 de noviembre, los cuales, según reconoció el Ejército Árabe Sirio, ‘se intensificaron en las últimas horas, generando el aumento de muertos y la penetración de las fuerzas yihadistas en Hama’.

Luego de tomar Hama, HTS -Organismo de Liberación del Levante, en español- informó que marcharían sobre Homs, ciudad ubicada a 140 kilómetros de Damasco, capital de Siria. Esto pone más presión sobre las fuerzas de Assad, quienes no están logrando frenar a los yihadistas pese al ataque aéreo ruso que destruyó su centro de operaciones en la ciudad de Idlib.

Esta repentina reactivación de la Guerra Civil Siria sucede en un momento complejo para el principal aliado del régimen de Bashar al-Assad, Rusia. Los intereses estratégicos de Putin en Siria se deben a la base naval de Latakia, salida rusa al mediterráneo, y a la importancia que supuso para Putin la intervención rusa en Siria.

Sin embargo, actualmente Rusia tiene concentradas sus fuerzas en la guerra de Ucrania, por lo que ha tenido que abandonar el resguardo de ciudades sirias como Tartús.

Por otro lado, Irán está en similares condiciones que Rusia, con sus fuerzas concentradas en apoyar a Hezbolá y con los ataques israelíes sobre el grupo libanés, Irán no puede concentrarse tanto en Siria.

Con todo, día a día la ofensiva avanza más y Siria se desestabiliza, con Turquía como el único país capaz de concentrar su fuerza en Siria, apoyando al Organismo de Liberación del Levante en su ofensiva sobre las fuerzas del Ejército Árabe Sirio.