El abogado y empresario fue detenido por personal de seguridad municipal y posteriormente formalizado, quedando con medidas cautelares de firma mensual y arraigo nacional durante los 100 días que dure la investigación.
Según la acusación de la familia del conserje, de nombre Guillermo, el hombre le había pedido un cigarro a la víctima y al negarse, porque no fuma, habría comenzado la golpiza. Además, mencionaron que habría agredido a dos mujeres, quienes no hicieron su denuncia en Carabineros.
Héctor Oyarzún, hijo de la víctima, sostuvo que el agresor «estaba bajo los efectos de alcohol y drogas, no sé qué tipo de drogas, pero el gallo estaba totalmente descontrolado”.
También añadió que Guillermo “está en shock. Está nervioso, llora a cada rato y no quiere decir más, porque psicológicamente está muy mal». Guillermo llevaba 20 años trabajando en el edificio y tenía planes de retirarse definitivamente este año, ya que se había jubilado hace cinco. Actualmente, se encuentra internado en la Mutual de Seguridad, donde enfrenta un proceso de recuperación que podría extenderse entre 10 y 11 meses.